Guárdate de las ciencias,
que muy a pesar de su nombre,
¡sí hay esporas malditas!
Surgen, resurgen en tus dedos pendientes
y miras
y escuchas
y ríes con las murmuraciones ajenas
que no serán ya más las de tus hojas de otoño.
Ya no serán las garbas,
ligeras y pendientes
antenas capaces de hacer con el sol el perfume de tu pelo.
Mujer,
Guárdate de las ciencias.
Toma aire, bríndate a mis raíces.
que muy a pesar de su nombre,
¡sí hay esporas malditas!
Surgen, resurgen en tus dedos pendientes
y miras
y escuchas
y ríes con las murmuraciones ajenas
que no serán ya más las de tus hojas de otoño.
Ya no serán las garbas,
ligeras y pendientes
antenas capaces de hacer con el sol el perfume de tu pelo.
Mujer,
Guárdate de las ciencias.
Toma aire, bríndate a mis raíces.
Dancizo Toro